En lo referente a datos publicados, la creación de empleo en EEUU en octubre superó las previsiones a la vez que se revisaron al alza los datos de los meses anteriores. Así, desde agosto, la media de creación mensual de empleo ha superado los 400.000 puestos de trabajo.
En cuanto a los precios, la inflación de octubre en EEUU se situó por encima de lo previsto con una subida del +0,9% en el mes que sitúa la tasa interanual en el 6,2%, el nivel más alto desde diciembre de 1990.
En los mercados de renta fija, la publicación de la inflación americana propició fuertes ventas. La TIR del bono del gobierno americano a 10 años subió más de 10pbs en la sesión del miércoles y se situó en +1,54%. En la Zona Euro, la TIR del bono del gobierno alemán a 10 años se situó en -0,25% y la prima de riesgo española está en 71p.b.
Los beneficios empresariales del 3ºT21 han seguido sorprendiendo al alza y los índices S&P500, Nasdaq, StoxxEurope600 y Dax alemán han anotado nuevos máximos históricos en esta semana. El dato de inflación de EEUU propició tomas de beneficios en la bolsa americana en la sesión del miércoles.
El precio del crudo Brent ha alternado jornadas de avances y de recortes y se sitúa en torno a 82$/barril.
En la divisa, el dólar se ha fortalecido frente al euro y se sitúa por debajo de la cota del 1,15$/€.
Esta semana hablamos de Renta Variable. Factores a considerar a la hora de invertir en bolsa
A la hora de invertir, la renta variable es el activo potencialmente más rentable a largo plazo. No obstante, antes de tomar la decisión de invertir tenemos que conocer ciertos factores que marcarán la evolución de nuestras inversiones:
1. Riesgo. Al invertir en renta variable nos enfrentamos a:
- Riesgo sistémico o no diversificable. Aquel asociado al mercado en el que cotiza la acción: situación económica global y sectorial, tipos de interés, inflación, elementos geopolíticos, políticas monetarias…
- Riesgo no sistémico o diversificable. Asociado a la compañía y su evolución financiera: resultados, balance, perspectivas del negocio, equipo gestor de la empresa, política de dividendos…
2. Horizonte o plazo de inversión. El horizonte temporal de inversión es aquel periodo de tiempo durante el cual estamos dispuesto a mantener invertido nuestro capital, sin que tengamos la necesidad de destinarlo a otros fines o imprevistos.
En el caso de la renta variable, al ser un activo con mayor volatilidad que otros, un horizonte de inversión de medio y largo plazo nos permite reducir el impacto de la volatilidad que las acciones puedan sufrir en el corto plazo.
3. Diversificación. La diversificación será un elemento importante a la hora de reducir el riesgo de la inversión en renta variable y buscar la posibilidad de obtener retornos con menor volatilidad. Como ya os hemos contado en semanas anteriores, existen varias vías para diversificar: inversión entre acciones con diferentes características, o diferentes sectores de actividad, o de exposición a diferentes áreas geográficas.
En Santander Asset Management contamos con una amplia Gama de Fondos de Inversión de Renta Variable que cubren distintos estilos de inversión y áreas geográficas, y en los que un equipo de expertos, con profundos conocimientos en el mercado, se encargan de tomar las decisiones de compra / venta de las compañías.
Aviso legal: Santander Asset Management advierte que esta presentación contiene manifestaciones sobre previsiones y estimaciones. Dichas previsiones y estimaciones están incluidas en diversos apartados de este documento e incluyen, entre otras, comentarios sobre el desarrollo de negocios futuros y rentabilidades futuras. Mientras estas previsiones y estimaciones representan nuestros juicios sobre expectativas futuras de negocios, puede que determinados riesgos, incertidumbres y otros factores relevantes ocasionen que los resultados sean materialmente diferentes a lo esperado. Entre estos factores se incluyen, (1) situación del mercado, factores macroeconómicos, directrices regulatorias y gubernamentales, (2) movimientos en los mercados bursátiles nacionales e internacionales, tipos de cambio y tipos de interés, (3) presiones competitivas, (4) desarrollos tecnológicos, (5) cambios en la posición financiera o de valor crediticio de nuestros clientes, deudores o contrapartes. Los factores de riesgo y otros factores fundamentales que hemos indicado podrían afectar adversamente a nuestro negocio y al comportamiento y resultados descritos y contenidos en nuestros informes pasados, o en los que presentaremos en el futuro, incluyendo aquéllos remitidos a las entidades reguladoras y supervisoras, incluida la Securities Exchange Commission de los Estados Unidos de América. La información incluida en el presente documento ha sido recopilada de fuentes que SANTANDER ASSET MANAGEMENT S.A. S.G.I.I.C. considera fiables aunque no ha confirmado ni verificado su exactitud o que sea completa. Santander Asset Management no asume responsabilidad alguna por el uso de la información contenida en este documento, el cual no constituye ninguna recomendación ni asesoramiento personalizado ni oferta ni solicitación. La inversión en fondos de inversión u otros productos financieros indicados en el presente documento pueden estar sujetos a riesgos de inversión: riesgo de mercado, riesgo de crédito, emisor y contraparte, riesgos de liquidez, riesgos de divisa y, en su caso, riesgos propios de mercados emergentes. Adicionalmente si los fondos materializan sus inversiones en hedge funds, o en activos o fondos inmobiliarios, de materias primas o de private equity, se pueden ver sometidos a los riesgos de valoración y operacionales inherentes a estos activos y mercados así como a riesgos de fraude o los derivados de invertir en mercados no regulados o no supervisados o en activos no cotizados. Las rentabilidades del pasado no son indicativas de resultados en el futuro. Cualquier mención a la fiscalidad debe entenderse que depende de las circunstancias personales de cada inversor y que puede variar en el futuro. Es aconsejable pedir asesoramiento personalizado al respecto.